Escribiré poemas de amor entre Hematíes

Yo debería existir aunque sólo fuera para hacerte sonreír

Hoy quiero cortar con saña mi piel hasta llegar al hueso,
quiero comprobar el color de mi sangre, si resplandece.
Saber si las erres de tu nombre duermen tranquilas en las esquinas de mi carne.

Lo voy a hacer de una forma amable, sin cuchillas afiladas.
Se lo pediré con respeto, como un Alibabá gritaré “ábrete”.
Besaré cada recuerdo de tus labios que enmarqué.
Lloraré tu ausencia.

Desempolvaré pensamientos impuros, deseos imborrables,
bañaré de miel los días que no vivimos juntos.
Y quemaré las hojas del diario en las que no escribí tu nombre.
Pocas cerillas necesito.

Y a cada gesto le daré un número.
Y a cada número le asignaré una letra,
con ellas escribiré poemas de amor entre hematíes.
Agarraré con fuerza mis entrañas y gritaré tu nombre.

De un susto detendré mi corazón, 
romperé tus cartas
pintaré de azul mi memoria, 
de agua de mar, 
de paseos por la playa.

Buscaré en mis dedos restos de tu piel
y clonaré tu ausencia.

Si con todo esto no consigo volver a hacerte sonreír,
pisaré pieles de plátano por ti.