Corrían tiempos salvajes
de horizontes lejanos y cielos infinitos.
Cabalgábamos hasta el anochecer
y contábamos historias de amor
al calor de la hoguera.
Lo recuerdo como si fuera ayer,
pero un ayer lejano,
doloroso
y sin compasión.
de horizontes lejanos y cielos infinitos.
Cabalgábamos hasta el anochecer
y contábamos historias de amor
al calor de la hoguera.
Lo recuerdo como si fuera ayer,
pero un ayer lejano,
doloroso
y sin compasión.